Sin un color tradicional, a lo largo de la historia tuvo modelos amarillos, verdes y hasta negros, pero en Qatar vestirá de blanco como alternativa al primer uniforme. Con un cuello escote en V y detalles negros, la selección argentina guarda entre sus más preciados recuerdos a una camisetas con más mística de la historia. Cuello redondo, con color negro y tres tiras a los costados del abdomen. España jugó en tierras norteamericanas con una camiseta roja con cuello azul y tres rayas verticales con rombos (amarilla, azul, amarilla) en el lado derecho de la camiseta. Vanesa Santana (Sporting de Huelva de España). Volvió varios años después, cuando la invitaron a jugar un torneo relámpago y demostró una vez más sus cualidades. E hicieron las paces: “Él reconoció que jamás había tenido la intención de cambiar la camiseta de la Selección pero que la única vez que le tembló el pulso fue con la mía.
De hecho, las cifras están disparadas: «Las camisetas ‘replica’ están en pleno ‘boom’, las cinco principales ligas vendieron el año pasado más de 16 millones de unidades, y se espera que siga el crecimiento», dice Peter Rohlmann, doctor en ‘marketing’ y uno de los mayores expertos en camisetas de fútbol del mundo. El certamen repartirá, en total, 152 millones de dólares en premios, el triple de lo que se distribuyó en Francia 2019 y 10 veces más que Canadá 2015. El dinero no solo se otorgará a las federaciones de los países, sino también que las 736 futbolistas de los 32 equipos recibirán un premio de 30.000 dólares por solo competir en la etapa de grupos. Según proyectaron, la oscilación del precio de venta sería superior a las 5 millones de libras esterlinas, casi 8 millones de dólares. Si bien la lucha es prácticamente mano a mano, el asiático lidera la carrera con un monto superior a los 22 mil euros.
Con este diseño, Argentina alcanzó los octavos de final, cayendo ante Francia por 4-3. Con un diseño más bien geométrico, las líneas de las «tres tiras» negras y las mangas blancas, se innovó respecto a la indumentaria anterior. Si bien es cierto que anteriormente veíamos con mala cara a quienes consideraban aceptable un look de vaqueros y camisetas de fútbol, las cosas cambian… Una de las firmas de high street que habitualmente tratan matices deportivos es Martine Rose. Con este diseño innovador, la selección argentina tuvo una de las camisetas más lindas de la última década. No la tiene este hombre. Este se debió a que Bernardo Grobocopatel, el presidente del conjunto que juega en la Primera Nacional, es fanático de la Academia y por eso aquella noche en Jujuy vistieron esa particular camiseta sus jugadores. Pese a que durante muchos años la Celeste utilizó el rojo como color alternativo, antes del Mundial 2010 los jugadores pidieron volver al blanco y, desde entonces, se mantuvo la tradición, que seguirá en Qatar.
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